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Seguido del cambio de estación, vienen más cambios: del tiempo, de humor, de planes y también de decoración. Y qué mejor forma de conseguir esto último que cambiando algo tan fácil como los cuadros que tienes ahora por cuadros frescos.
El verano está para relajarse, ya sea haciendo planes o descansado en casa, y ambientar y adecuar nuestro hogar es imprescindible para que el estado de ánimo sea el deseado.
¿Te apetece tener un hogar fresquito para este verano? Te damos las claves sobre qué características buscar en los cuadros que te ayudarán a conseguirlo.
Color
El color es un elemento clave para conseguir diferentes objetivos. Es capaz de transmitir paz, alegría, energía e incluso sensación de enfado o alteración.
Puedes elegir colores más intensos, que den alegría a tu hogar, ayudándote con el cuadro Arte Abstracto Memphis y Caras Picasso. Ambos son trípticos muy coloridos que contagiaran energía a aquel que los mire.
Si prefieres la serenidad, pero con un toque fresco, el azul conseguirá transportarte a la playa y a los paisajes de verano, por lo que ha de ser el elegido. La intensidad de azules y la calma que genera el dibujo del cuadro Espiral, es perfecta para ello. Y la luz y paz que transmiten los cuadros Serenity y Moonlight no dejarán indiferente a nadie. Aportan ese toque de brillo a la estancia, de frescura que todos buscamos conseguir en épocas de calor.
Paisajes
Los paisajes nos transportan de forma rápida a momentos vividos y sensaciones que hemos sentido o nos gustaría sentir. El cuadro Conchas playa nocturna tríptico te transportará a la misma orilla del mar, haciéndote sentir la brisa nocturna que tanto relaja. Sus tonos cálidos aportan serenidad, pero la luz de la luna le da ese toque de vida al cuadro. Si lo que quieres es tener vistas al mar estés donde estés, no dudes en incorporar a tu colección nuestro cuadro que abre una ventana en tu casa con unas vistas inigualables.
Calma y frescura
Qué puede haber mejor que un cuadro que te transporte a momentos veraniegos de calma, de relax. Un atardecer sintiendo la brisa en la cara o el agua fresquita del mar sobre los pies.
Para sentir el mar, el cuadro Amore, con sus tonos azules y rosas, dará mucha vida y luz a la estancia. Transportando un momento de brisa veraniega y el sonido relajante del mar a tu casa.
¿Y qué opinas de un día lluvioso de verano? Esa sensación fresca sobre la piel tras pasar la tormenta, cuando el sol aún sigue escondido y los colores del cielo te invitan a observarlo durante horas. El cuadro Storm, con tonos grises, azules y un toque muy especial de naranja y dorado, conseguirá que te metas en él a revivir ese mágico momento.
En Dekoarte creemos que con los cuadros se pueden conseguir cosas maravillosas. Descubre todo lo que pueden hacerte sentir en nuestra web.
